Emocionado y casi sin palabras. Juan Luis Alonso Doral ha guiado al Manzanares Fútbol Sala Quesos El Hidalgo a Primera División tras superar a la Unión África Ceutí y el CD El Ejido Futsal en unas series finales de infarto. “Es la culminación de un trabajo de muchos años”, afirmó el técnico madrileño, que tuvo palabras de recuerdo para sus predecesores: Carlos Sánchez Rozas, Rubén Barrios y Chema Jiménez. “Ha sido como una carrera de relevos, todos han ido aportando al equipo y a mí me entregaron la última posta”, subrayó.
Juanlu Alonso destacó lo igualada que ha estado la final: “Los dos equipos nos merecíamos el ascenso, pero al final nosotros tuvimos esa pizca de suerte”. El entrenador del Manzanares señaló que la clave ha estado en el “compromiso” de la plantilla, “pero un compromiso de verdad, de estar dispuesto a sacrificarte”. “Estos jugadores son muy grandes y se merecen disfrutar este ascenso. Algunos se levantaron a las seis de la mañana para ir a trabajar, después vinieron aquí y se dejaron la piel en la pista”, enfatizó.
Sobre el hecho de tener una plantilla corta, Alonso confesó que “tiene cosas positivas porque todo el mundo se siente importante, pero tienes el riesgo de las lesiones, que nos han respetado bastante, salvo la desgracia de Manu Diz, que se merecía como el que más estar aquí”. “Y gracias a él estamos en la final. Esta plantilla forma un grupo muy unido”, remarcó.
Juanlu Alonso dio las gracias a cuerpo técnico, plantilla, colaboradores, patrocinadores e insistió en que este ascenso “es algo que se ha construido con el paso de los años”. Y se lo dedicó a su familia, “porque esta profesión de entrenador es durísima, tiene muchos sinsabores, son muchas horas de trabajo y hay muy pocos momentos como estos”. “Tú eliges esta profesión, pero tu familia no y ellos la padecen”, sentenció.